La Manzanilla atrae abundancia, paz, amor y tranquilidad; la Caléndula simboliza la pasión y la creatividad y el Olíbano es un gran purificador natural.
Combinados armonizan la consciencia, elevan la vibración y fortalecen nuestro poder interior al liberar rayos de amor que generan auras de protección, contención y felicidad.